"El médico encerrado en su consulta proyecta salud en cientos de pacientes, el que se asoma a Internet, ayuda a millones"




Bruno Nievas.
En sus respuestas se nota que le gusta escribir y que domina la comunicación escrita más de lo habitual. Bruno Nievas es un pediatra sui generis que cura, pero también escribe. Médico y escritor, aprovecha su vena narrativa para escribir novelas, pero también consejos a las madres y padres con el objetivo de instruirlos y entrenarlos para que acudan menos a urgencias, y se ahorre en tiempo y en costes. De momento, esa idea es más un argumento de sus libros que una realidad.

Los juegos, las Apps, los ordenadores, la tecnología, los medios de comunicación, la novela... ¿Estás seguro de que querías ser pediatra y no ingeniero técnico superior o escritor aspirante al Planeta?
Si me hubieras hecho esta pregunta hace unos años, me hubiera reído, pero por un motivo completamente diferente. Y es que ahora la respuesta es un rotundo no. Me encanta la pediatría y es una profesión que, ejercida en determinadas condiciones, es una de las mejores. Sin embargo, las maravillosas posibilidades que se me han abierto en los últimos tres años gracias a mis novelas me han hecho ver las cosas de un modo diferente. Hay un mundo inmenso ahí, fuera de la consulta, esperando a que pongamos en práctica nuestra inquietud. Así que ahora, y con el corazón en la mano, no tengo ni idea de qué es lo que estaré haciendo en los próximos años. Pero sí sé que tengo más ilusión que nunca en el futuro.

En tu blog sobre pediatría dices que ofrecer información fiable. ¿Sabrías definir qué tiene que tener una información en Internet para que sea fiable para un usuario?
Por supuesto, y además es muy sencillo: una fuente, un origen claro. En mi caso especifico claramente que la información la escribo basándome en los mismos libros que estudio para mi ejercicio diario o en webs como la de la Asociación Española de Pediatría, por ejemplo, y no se basa en ningún caso en apreciaciones personales. Lo ideal es que las webs que ofrecen información médica vayan avaladas por organismos oficiales (en la mía estoy en ello) o, en su defecto, por profesionales con nombre y apellidos que firmen la información y que por supuesto adviertan que esta siempre es relativa, no aplicable a todos los casos, y además está sometida a un proceso de evolución constante. Así no se engaña a nadie.

"Las herramientas como Twitter son esenciales para permanecer conectados y comunicados, el mundo ya es global y hay que estar ahí"

También dices que la información es gratuita. ¿Crees que la tecnología va a hacer la salud más accesible a todos o sólo le sacará partido, como hasta ahora, la sanidad privada?
Le tecnología es una mera herramienta y como tal sirve para todo, sea bueno, malo o ambiguo. En mi caso he optado por ofrecer información gratuita porque muchas personas no saben dónde acceder y son reticentes a pagar por ella. Creo que es una labor necesaria y que los padres agradecen. Además es muy satisfactoria. Pero tampoco critico a quien desee obtener un beneficio económico. Es lícito y pienso que el trabajo ha de ser recompensando. Lo que admiro de la tecnología permite que, lo hagas como lo hagas, millones de personas puedan acceder a tu trabajo con solo unos clics.

Eres muy activo en Twitter ¿Crees que hace falta algún tipo de formación no solo en medicina, sino en comunicación para estar en esta red social de manera profesional como médico?
Por supuesto. La comunicación es esencial, es la base de la relación médico-paciente y de las personas entre sí. Puedes ser un gran médico pero si no te comunicas bien con tus pacientes jamás lograrás establecer una relación de confianza con ellos. Comunicar es esencial, es el nexo de unión con la persona que tienes delante… o al otro lado de la pantalla. Las redes sociales o herramientas como Twitter son esenciales para permanecer conectados y comunicados. El mundo ya es global y hay que estar ahí. El médico encerrado en su consulta solo proyecta salud en unos cientos de pacientes. El médico que se asoma a Internet ayuda a millones.

¿Es inconcebible ya una sanidad sin tecnología? ¿Entonces por qué hay tantas reticencias a veces?
Claro que es inconcebible, de hecho la tecnología impregna cualquier rincón de un hospital, solo hay que mirar una unidad de radiología, ¡parecen estaciones espaciales! E igual de útil que puede ser una radiografía, lo puede ser un post en un blog donde enseñes a prevenir las intoxicaciones infantiles en el domicilio. Si cientos o miles de personas se leen ese post, a lo mejor evitas unas cuantas intoxicaciones. Y con eso acabas de mejorar la calidad de vida de unos cuantos niños, le has evitado sustos a los padres y le has ahorrado unos euros a nuestro anémico sistema sanitario. Así que si existen reticencias se deben solo al mero desconocimiento. Solo con un poco de formación sanitaria y tecnológica, mínimas, podríamos mejorar la salud de millones de personas y ahorrar mucho dinero.

"Solo con un poco de formación sanitaria y tecnológica, mínimas, podríamos mejorar la salud de millones de personas y ahorrar mucho dinero"


eBook, blogs, redes sociales... ¿Qué te queda pendiente dentro de la pediatría 2.0?
Mucho, muchísimo. Realmente no se trata de estar en muchos sitios sino de ser en verdad útil. Si logro llegar a muchas personas y ofrezco información de verdad valiosa, entonces estaré mejorando la salud de muchos niños. Y ese es, al menos para mí, el único indicador fiable de que estaría haciendo las cosas bien. Aparecer en webs, Facebook o Twitter no sirve de nada si lo que haces no lleva un inmenso trabajo detrás que se transforma en hechos reales: si explicas los signos de gravedad en un lactante y luego unos padres saben reconocerlos y acuden a urgencias a tiempo para abortar una infección grave, eso puede servir para salvar la vida de un niño. Y eso es lo que hace de verdad grande esa labor. Y eso es lo que deseo, ayudar a que la gente adquiera conocimientos que ayuden a la salud de sus hijos. Y siempre quedará trabajo por hacer, ahí.

¿Cuáles crees que son los retos tecnológicos a los que se enfrenta la salud actual?
El mayor reto al que se enfrenta la salud actual no es tecnológico sino educacional. Cualquier paciente sabe manejar Internet y las redes sociales. Lo que hay que concienciar es que no se trata solo de chatear con los amigos o compartir fotos graciosas. También uno tiene la obligación de informarse y de aprender sobre su salud y la de sus hijos. Solo con los conocimientos se podrá mejorar la salud de la población. La barrera tecnológica está superada. Ahora nos falta llegar de verdad al paciente.

"El mayor reto al que se enfrenta la salud actual no es tecnológico sino educacional"

Y un pediatra ¿A qué desafíos se enfrenta hoy día en los que hace unos años ni pensaba?
Creo que el mayor reto consiste en que muchos padres siguen creyendo más en las pruebas y en los tratamientos que en la prevención en sí. Siempre he afirmado que es mejor evitar que un niño sea obeso que luego controlarle el colesterol. Es mucho más útil enseñar a manejar los gases o los mocos que recetar medicamentos para tratarlos, que cuestan dinero y no siempre funcionan. Los padres instruidos y entrenados tienen niños que enferman menos y acuden menos a urgencias. Ese es el reto actual, conseguir más niños sanos trabajando de antemano. Pero es algo que, por desgracia, muchos padres no quieren ni escuchar. Refieren que no tienen tiempo para eso...